Només l’amor ho il·lumina tot : Càritas convida a compartir aquest Nadal l’alegria d’estimar els altres
La guerra en Ucrania y las enormes dificultades que la inflación está provocando en la vida cotidiana de muchos hogares pone de manifiesto que el nacimiento de Jesús está hoy más cerca que nunca de los pobres y vulnerables. Conscientes del enorme esfuerzo que hacen estas personas para recuperar su puesto en la sociedad, Cáritas ha lanzado su tradicional campaña de Navidad con el lema “Sólo el amor lo ilumina todo”.
Según el informe “El coste de vida y las estrategias familiares para abordarlo”, casi dos de cada diez hogares vulnerables se han visto obligados a acudir a la parroquia, a los servicios sociales o a una ONG para poder cubrir las necesidades básicas de alimentación. La mayoría de estas personas sufren exclusión severa. Elinforme FOESSA -presentado por Cáritas a principios de año- estima que más de dos millones de familias se encuentran en esta situación de máxima precariedad en nuestro país.
En Cáritas sabemos que cada informe que realizamos, cada cifra o cada dato explica la historia de personas reales con voz y alma, personas que luchan por recuperar su dignidad y sus derechos. Los informes son señales en el camino que nos permiten ver la realidad, para interpretarla y distinguir qué hacer con ella.
En el trabajo cotidiano, las más de 5.400 Cáritas parroquiales son testigos directos de las heridas que van dejando en buena parte de la población estos tiempos difíciles y complejos. Las guerras, las oleadas migratorias entre países y las secuelas de la pandemia conviven con otras sombras no menos violentas y cercanas, como la ocupación precaria, la exclusión social que sufren uno de cada tres jóvenes, la escasez de vivienda accesible para quienes tienen menos recursos o los problemas de salud mental y la soledad que se va enquistando en calles y hogares.
Sin embargo, la Navidad llega como el tiempo favorable, la luz como signo de esperanza, como lo necesario para saber por dónde hacer camino, es también el símbolo de lo bueno que podemos descubrir cada día. ¡Dónde hay luz hay vida! El reto en nuestro día desde la atención a las personas que menos pueden, que son descartadas, que han perdido la esperanza, es poder ser luz, señal inequívoca de que cada uno encontrará su camino, su oportunidad y podrá dejar atrás la oscuridad vital que provoca el desánimo y la desesperanza.
A través de su campaña, Cáritas invita a toda la sociedad a tomar conciencia de que el Amor que compartimos con otras personas nos iguala como humanidad, nos convierte en una gran familia y nos llama a disfrutar del bien común que aspira a encarnarse en el pleno acceso de todas las personas a los derechos humanos.
Convencidos de que el Amor es el motor que nos impulsa a ponernos en el lugar del otro, Cáritas propone aprovechar este tiempo de Adviento para compartir la alegría de amar a los demás. Estas Navidades queremos llevar luz y que nos sintamos portadores de luz, responsables y comprometidos con el significado de la Navidad, el nacimiento de la vida a cada persona, con los que menos tienen, con los que se sienten solos y tristes.
